Seguro que más de una vez has pensado en como poder eliminar este depósito de tu dentadura. El sarro está formado por sales y restos de alimentos que se quedan entre los dientes, formando lo que conocemos como placa, y si esta no se elimina termina endureciéndose y produciendo lo que conocemos por sarro o cálculo. Estéticamente se ve mal, pero este no es el mayor problema que genera ya que si no se elimina a tiempo pueden surgir problemas periodontales (enfermedades de las encías). Hay dos tipos: supragingival, que se forma en la parte inferior del diente, justo por encima de la línea de las encías y el subgingival, formado debajo de dicha línea.
La manera más efectiva de no tener sarro es evitando que aparezca, ya que una vez que se ha depositado en la dentadura la única forma de eliminarlo de forma segura y efectiva es acudiendo a nuestro dentista. Para prevenir su depósito es imprescindible una buena higiene, la cual debe incluir el cepillado tres veces diarias a ser posible con la pasta indicada y mantener limpio el espacio entre las piezas dentales usando cepillos interdentales o hilo dental.
Una limpieza profesional una o dos veces al año es muy importante, ya que el dentista eliminará los pequeños depósitos que pueden haberse formado y así evitará que se siga acumulando.
Los hábitos de la persona también son claves. Hay que consumir alimentos saludables, evitando sobre todo el azúcar, las bebidas con gas y el alcohol. El tabaco también se debe evitar, ya que produce resíduos que se acumulan con facilidad en la dentadura.
En resumen, para evitar la aparición del sarro hay que mantener los dientes limpios, llevar una buena dieta, no abusar del azúcar, beber con moderación y no fumar. ¿No te resulta familiar? ¡Son las mismas premisas que hay que seguir para una vida sana!